Del Otro Lado de la Vida

Los he cruzado en mi camino.
A ellos,
a los que perdieron el tren
que nunca vino.
Los he visto revolver necesidad
-tan mínima como extrema-
en la basura de la noche
que la ciudad deja como estela
de su desborde;
o arrastrando un carro de todo y nada
que a manera de cruz
certifica un destino, casi escrito;
los he cruzado en más de una esquina
mostrando malabares de penurias.
Quién, mejor que ellos
puede saber lo que es el frío
cuando se hunde en los huesos,
como implacable bisturí?
Quién puede conocer mejor
el sabor de la angustia intensa
cuando el hambre cruje?
Ojos perdidos,
mirada estática, casi de estatua.
Son ellos,
los que pasan invisibles
por la calle principal de los días,
rodeados de una multitud de vacío
que pinta indiferencia.
Son ellos,
Los que perdieron el tren
que nunca vino.
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Alguna vez te has preguntado
que hubiese sido
de tu prolija y ordenada vida
si hubieras nacido
del otro lado?

“La violencia aparece cuando desaparece la razón. La razón desaparece cuando aparece la necesidad extrema. La necesidad extrema aparece cuando desaparece el corazón y este desaparece cuando nada importa mas que uno mismo”.