Arroja una piedra al lago.
Observa como se deforma el agua en círculos concéntricos y todo el lago se entera que has arrojado una piedra.
Esa piedra, que tú crees sin vida, eres tú cuando VIVES.
Observa como se deforma el agua en círculos concéntricos y todo el lago se entera que has arrojado una piedra.
Esa piedra, que tú crees sin vida, eres tú cuando VIVES.
Si quieres acercarte a la verdad, pregúntale a tu alma y no a tu cerebro.
Ella vivió más tiempo.
Si el replanteo es constante, el progreso es creciente.
Cuida tu imagen externa si el comercio es imperioso.
En cualquier otro caso no hará falta.
El hombre que pasa dejando huella nunca muere.
Todo lo que hoy no hagas, te espera mañana.
No todo lo que reluce es oro.
Ni todo lo opaco es plomo.
Cambiando nuestro entorno le avisamos a la vida que vivimos.
No te escapes de la soledad.
Es el único momento que estás con vos.
Los palacios de cartón finalmente se derrumban.
El futuro es infinito y el presente es instantáneo.
Los atajos, en la vida, finalmente se tornan más largos que el camino.
Sólo el que abre caminos, no conoce su destino.
Ya sé que eres ingeniero.
Ahora muéstrame si eres ingenioso.
La ley es necesaria para los que no saben vivir.
Y para los que quieren vivir a costa de los que no saben.
Se debe construir mas puentes y derrumbar más paredes.
El mundo estaba tranquilo cuando no había paredes.
…Bueno, pero tampoco había puentes…
¿No? y los mares que eran?
La filosofía de “entre casa” puede ser tan buena como la de los libros si en la casa habitan filósofos de la vida.
La mejor forma de aprender es equivocándose.
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